Policía Nacional: S/100 millones en logística tras 'reajuste' que aceleró las compras
Policía Nacional recibió más de S/100 millones en logística luego de un 'reajuste' normativo que facilitó compras rápidas: récord histórico y eficiencia.
¡S/100 millones y ni un minuto de papeleo! —la nueva comedia logística
La Policía Nacional del Perú acaba de batir un récord histórico que seguramente llevará su nombre en letras de neón: más de S/100 millones en logística llegaron a las arcas institucionales gracias a un 'reajuste' normativo diseñado para que las compras sean tan rápidas que hasta los formularios se marean.
En términos no técnicos: antes había colas, firmas y café frío; ahora hay paquetes, drones y chalecos antibalas con garantía exprés. Las autoridades celebran que la burocracia se volvió fitness y corrió en una sola sesión: trámites que antes demoraban meses ahora se tramitan antes de que termine la playlist del auto oficial.
Los beneficios son evidentes y medibles en unidades palpables: motos que prometen patrullar por sí solas, linternas con modo 'disco' para intervenciones nocturnas y un suministro aparentemente infinito de esposas —aunque algunos agentes confiesan que son más largas de lo necesario para atar la paciencia de los proveedores.
Expertos curiosos y un par de vecinos opinan: —Dr. Crispín CompraFácil, especialista autoproclamado en adquisiciones veloces, asegura que 'la nueva normativa convierte cualquier licitación en una receta de cocina: mezcla, agita y sirve caliente'. Mientras tanto, un proveedor anónimo afirmó que ahora los documentos se firman viendo la primera página del diario: 'Si el titular se ve bien, no hay objeción'.
Estadísticas oficiales (y otras sacadas de un sombrero): 87% de las compras se completaron antes de que un tuit se volviera viral; 52% de los proveedores ganaron por consenso, intuición o piedra-papel-tijera; y el 100% de las entregas incluyen una sonrisa protocolar y una factura que, curiosamente, desaparece por arte de magia administrativa.
Los críticos piden explicaciones sobre controles, transparencia y razonabilidad. La respuesta institucional fue contundente y elegante: 'eficiencia'. Para quien quiera ruido: hay comisiones, auditorías y protocolos. Para quien quiera paz: hay logística. Y para quien quiera memes, hay ambos.
Conclusión (no tan seria): si la norma seguirá acelerando compras como fórmula milagrosa, la próxima vez quizá la Policía reciba un estadio entero, un conjunto de banderolas con GPS y un ejército de drones etiquetados como 'personal de apoyo logístico'. Mientras tanto, el reajuste normativo sigue su curso y la logística hace su tournée por todo el país, dejando a su paso cajas, sellos y un tufillo a increíble eficiencia.
Nota final absurda: según un sondeo interno y no corroborado, el 99% de los funcionarios sostienen que ahora las compras se realizan 'antes del segundo sorbo de café'.
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