Proinversión apoyará la conexión Lima–Chosica, pero la fecha sigue siendo un misterio oficial
Proinversión apoyará técnicamente la conexión Lima–Chosica, pero el alcalde no dijo cuándo funcionará. Entre anuncios y planos, la ciudad espera con humor.
Titular sensacional (y ligeramente honesto): Proinversión ha decidido darle al proyecto Lima–Chosica el cariño técnico que necesita —es decir, manuales, firmas y buena voluntad— mientras el alcalde se reserva el dato más emocionante: la fecha de puesta en marcha. ¿Fecha? ¿Qué fecha?
En un acto de precisión administrativa digno de un reloj de pulsera sin manecillas, Proinversión ofrecerá asistencia técnica. Traducido al idioma real: expertos vendrán a mirar mapas, harán dibujos con regla y compás, y elaborarán planillas que parecen invitar a soñar con trenes que llegan a horario. Todo muy profesional. Todo muy técnico. Todo muy útil para poner en presentaciones con fotos bonitas.
El alcalde, por su parte, practicó el noble arte del silencio programado. No precisó fecha. No porque no quiera informar, sino porque la fecha decidió tomarse unas vacaciones indefinidas en el mismo cajón donde duermen las promesas electorales. "Estamos en conversaciones", dijo —frase que en realidad significa: "estamos en conversaciones con la almohada antes de la siesta"—.
Mientras tanto, los limeños siguen cruzando la Carretera Central con la paciencia de quien practica un deporte olímpico. Algunos ya se apuntaron a clases de respiración para atascos; otros aprenden a leer novelas completas en el tiempo que dura un 'avance' de tránsito. Los memes han declarado el proyecto Patrimonio Cultural de la Broma Nacional.
Cita de la casa: "La asistencia técnica es como ponerle ruedas nuevas a una carreta: estéticamente impecable, pero no garantiza que se mueva", afirmó Irma Imaginaria, experta en promesas urbanas con doctorado en sarcasmo. También agregó: "Cuando tengamos fecha, lo anunciaremos en horario estelar, justo después del pronóstico del tiempo y antes del horóscopo".
Estadística no científica (pero muy convincente): 87% de los pasajeros encuestados —por un periodista que estaba aburrido— cree que la conexión operará justo después de que los semáforos aprendan a bailar salsa. El 13% restante confía en que llegará cuando el alcalde encuentre la fecha entre las facturas del mes.
Conclusión (por ahora): Proinversión trae la caja de herramientas; el municipio, el misterio. Y el público —entre bocinazos, historias y chistes— practica la paciencia con dedicación peruana. Si pretende viajar de Lima a Chosica algún día en algo que no sea carro, taxi o fe, mejor practique la respiración y mantenga su sentido del humor actualizado.
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